
En el mercado de accesorios para nuestro correcto descanso podemos encontrar almohadas de todo tipo; las hay de plumas, de látex, de fibra y las viscoelásticas. Entre todas ellas el último tipo es aquel que ha destacado por adaptarse mejor al cuerpo reduciendo la presión que nuestro peso puede crear sobre ciertos lugares como el cuello o el área lumbar.
Una almohada viscoelástica es más que una simple pieza de algodón o poliéster, es la fórmula perfecta para recibir un tratamiento terapéutico mientras se descansa. Debido a su elevado costo que nace de su excelente calidad muchas personas cometen el error de adquirir falsas viscoelásticas que se venden a menor costo, la mayor prueba de confianza que puede darnos un fabricante es una cremallera en la almohada con la cual podamos abrirla y comprobar su interior.
Este tipo de almohadas y cojines entregan enormes ventajas a sus usuarios; algunas relacionadas con la comodidad, otras con la salud, lo importante es tener en cuenta que existe una gran cantidad de beneficios con los cuales se asegura que vale la pena comprar una.
Adaptabilidad por presión-calor
Las almohadas viscoelásticas aprovechan la temperatura del cuerpo y el peso que este impone para adaptarse a la forma natural de cada zona. En el caso de las almohadas y los cojines lumbares, la forma de la columna vertebral es adoptada para llegar fácilmente a una posición recta, logra hacer un ligero trabajo ante la mala postura que en algunos momentos adoptamos de forma inconsciente.
Proporciona comodidad a los trabajadores
Este tipo de almohada es ideal para todos aquellos conductores y empleados de oficina que durante largas jornadas laborales están sentados. Las almohadas viscoelásticas ayudan a mantener una posición neutral, esto es excelente para obtener comodidad durante esas difíciles horas de trabajo.
De todas formas deben recordarse recomendaciones para cuidar las lumbares como hacer pequeñas caminatas o levantarse regularmente para tomar agua e ir al baño.
Reduce la posibilidad de sufrir dolores de espalda
Algunos cojines están hechos de materiales demasiado firmes que dañan la espalda. Las almohadas viscoelásticas se adaptan a la forma de la columna vertebral, así que no se aplica sobre ella ningún tipo de fuerza externa que produzca presión.
Estas almohadas para el descanso de nuestra zona lumbar suavizan los dolores musculares y de espalda produciendo una enorme relajación que no es comparable con las almohadas hechas de otros materiales.